martes, 19 de abril de 2011

COCINANDO UN MARATON: MAPOMA 2011




Jaal y Klass felices en Doctor Arce





INGREDIENTES PARA BAJAR DE 4 HORAS DIFRUTANDO:
1- 42.195 METROS (+-71) de terreno asfaltado.
2- Mitad de cuarto de ganas de correr.
3- 1 kg. de ganas de sufrimiento.
4- 4 kg. (léase meses) de Planes de Entrenamiento Mapoma.
5- 1 entrenador con solera (Félix Arévalo)
6- 1 entrenadora joven pero curtida (Inés)
7- 10 kg. de experiencia y simpatía, Chema de Mapoma.
8- Dependiendo del gusto de los comensales, se pueden añadir buenos compañeros de entrenamiento. Yo he elegido a los mejores: Estaban en la Casa de Campo todos los domingos: Javier, Jaime, Román, Juan, Oscar, Antonio, Daniel, Alberto y tantos otros…seguro que me olvido de alguno.
9- 1 fisio que vigile que el aliño del plato es el correcto, en este caso como en anteriores recetas el elegido fue Aitor.
10- Para que la receta tenga éxito conviene rodearse de buenos amigos que te apoyen durante su elaboración, yo los tengo.
11- Si os gusta la liebre, añadir a Pablo, de lo mejor que se puede encontrar. Con cabeza.
12- Y lo más importante, alguien a tu lado que vigile la cocción con muchas dosis de cariño: Gracias Martina.
Cuatro meses antes de cocinar el plato, cogemos al corredor y lo aliñamos con rodajes, series varias, cambios de ritmo y demás condimentos. Es muy importante la calidad de los productos, pues dependiendo de ella así será el resultado. Dejar macerar al raso una semana antes, vigilando, pues aunque la carne del maratoniano es dura, no conviene que se ablande demasiado.
Llega el día importante, no hay que ponerse nerviosos y haber descansado bien, pues la elaboración es complicada. Nuestra cocina móvil se pone en marcha. Comenzamos con una primera cocción de 2 horas a fuego muy lento y sin dejarse llevar por las prisas. Para ello es fundamental tener a tu lado a un chef de categoría que garantice que va a ser así, y nadie mejor que Jaal. Puede hacer que esos primeros 120 minutos pasen como si tal cosa, sazonando el guiso con anécdotas variadas y repasando las frases clásicas que se pueden oír en este tipo de eventos culinarios:
- “¿Cómo vas de piernas?”
- “¡Vamos, que ya queda poco!” (Oído en el kilómetro2, y en el 7, y en el 10, y en…)
- “¿Qué cojones hago yo aquí?”
- “¡Qué buen ritmo llevas!”
Durante esta primera cocción, te puedes encontrar con alguno de los grandes chefs que llenan la cocina ese día, saludar al gran José Moratinos en Raimundo Fernández Villaverde fue todo un honor.
Hablando, hablando pasan los kilómetros y una chiquilla nos ofreces rosquillas en una bandeja, de fondo suenan “Carros de fuego”. Atravesamos Guzmán el Bueno. Pensamos que no es buena idea comer el postre antes que el primer plato. Gracias de todas formas.
Cuando vamos acercándonos a las 2 primeras horas de guiso, consideramos que no es oportuno remover la salsa más rápido de lo estimado, a pesar de que la gente se agolpa a nuestro lado y nos animan y aplauden. Nuestra cocina móvil atraviesa la Centenaria Gran Vía y encara la comercial Preciados. Apenas hay comensales que quieran degustar nuestro plato, ¿estarán todos en la procesión?. No, están todos esperando en la Puerta del Sol, agolpados a nuestro paso. Tranquilos, el guiso no está listo, hay que esperar. Tras varios minutos removiendo, llegamos a la mitad de la cocción, hemos cumplido el objetivo de pasarnos cocinando por debajo de las 2 horas, exactamente en 1:59:25.
Enfilamos la Avenida de Valladolid. La olla está en plena ebullición, pues sabe que se aproxima la Casa de Campo y hay peligro de que se corte la salsa. Cerca de nosotros está Casa Mingo, famosa por sus pollos y empanadas, un aperitivo no estaría mal. Una pareja toma una cerveza en una terraza, nos ofrecen pero lo descartamos, quizá más tarde. Antes de girar a la derecha, dos cocineros se reparten un bocadillo de algo que parece Nocilla. Entramos en la Casa de Campo. Tras unos momentos de titubeo, Jaal se queda atrás con otros cocineros de Mapoma y le pierdo de vista. Creo que está buscando romero y tomillo para aderezar al maratoniano. A la altura de El Urogallo y tras saludar a la concurrencia, se sube a la cocina Pablo, de la A.D.COREBO y muy buen amigo. Trae una liebre y se empeña en echarla al guiso. Así lo hacemos. Pablo, que para algunas cosas tiene más cabeza que yo, me dice que estoy removiendo demasiado rápido, que esto no es lo que me ha recomendado el chef Gavela, pero me encuentro cómodo y pienso que hay que darle alegría al cuerpo. El muro que me encontré el año pasado en la cocina de la Casa de Campo, lo han alicatado, no lo veo, no existe y eso me da mucha moral. Tanta que en la cuesta de salida Pablo tiene que coger la olla, quitármela de las manos y decirme que hay que seguir los tiempos de receta paso a paso, pues la liebre no me puede seguir.
Empieza lo difícil, de lo que hagamos ahora depende el resultado final, empieza la épica. La olla empieza a pesar demasiado. La Ronda de Segovia me recuerda a los cochinillos de Cándido y me entra hambre. Tentado estoy de echarle mano al guiso, queda menos. La cocina móvil llega a Embajadores, a lo lejos se divisan las cúpulas del Ministerio de Agricultura, suenan jotas castellanas de fondo. Ronda de Valencia, alguien me toca le cuello por detrás, es Jaal, ha encontrado romero entre los arbustos de la Casa de Campo. Lo deja en la olla y se adelanta presto y veloz a poner la mesa, están a punto de llegar los invitados. Atravesamos Atocha y al comienzo de Alfonso XII un invitado inesperado, mi hemano Alfredo que me anima y nos acompaña unos metros. Viene acompañado de un señor que trae un mazo y golpea repetidamente la olla, está a punto de tirarla y nuestra receta se puede ir al traste. Alfredo le retiene y a mitad de la subida, Pablete y yo seguimos cocinando. Puerta de Alcalá, queda poco, hay que emplatar y servir. El equilibrio nunca ha sido lo mío y tengo miedo a que se me caiga la bandeja en el último momento, ando unos metros tomo fuerzas para el arreón final. La mesa está puesta, los comensales listos, Jaal ha hecho muy bien su trabajo y está todo preparado, entramos en el Parque de El Retiro a toda carrera.


Pablo y Klass enfilando la recta de Meta.



Saludo al Chef Supremo Félix Arévalo que está a la izquierda, la hinchada Runninguera animando a la izquierda. Pero sorpresa, a lo lejos, aproximándose a la mesa hay un repartidor de Telepizza que puede estropear el banquete,” Hay que llegar antes que él”, me dice Pablo. ¿Quedan fuerzas?, seguro que sí, como diría Rafa, el apretón del vago. Sprint largo y llegamos fuertes, felices, satisfechos. Nos fundimos en un abrazo el de las pizzas, Pablo y yo. El banquete ha sido un éxito.
Recetas aparte, sólo queda dar las gracias.
Al bueno de Jaal, estoy convencido que sin él la carrera del pasado domingo no habría sido lo mismo, gracias a ti he aprendido que, al contrario de lo que yo pensaba, se puede disfrutar corriendo un Maratón.
A Pablo, por compartir esos duros entrenamientos de los jueves en el Cerro de los Angeles, alguno de ellos entre el barro, quitándote de pasar tiempo con el pequeñín y por ayudarme en lo más duro del Maratón, a pesar de estar lesionado. Tu apoyo ha sido fundamental.
A Angélica, por darnos de cenar tan bien todos los jueves después de entrenar y por tus sabios y expertos consejos. Vas a bordar ese triatlón.
A todos los compañeros de entrenamiento por hacer unas jornadas de domingo amenas.
A Javier, te portaste como un campeón conmigo en Coslada, se valora y mucho.
A Andrés, sabes que te debo una y si te tengo que hacer de liebre durante 10 kilómetros en el campeonato de España, marca el ritmo que allí estaré.
Y a Martina, gracias por aguantarme y cuidarme.
Lo prometido es deuda. Para los muy curiosos, el test de Gavela dijo que mi ritmo medio sería de 5'41" y que sería sub4 horas, terminando en 3h59'. El pasado Domingo mi ritmo de carrera fué de 5'40" y terminé en 3h59'13", arañando 11 minutos al tiempo de 2010.



Unos amigos...Felicidades a todos!!




José Vilches, del Laister 3h32'27"


Oscar Cantero, de la A. D. Corebo 3h32'16"





Javier, compañero y amigo de Mapoma





Román, de Gacelas de Madrid 3h54'44"

MAPOMA 2011: UNA IMAGEN VALE MÁS QUE 1000 PALABRAS...


Soy feliz, pero me falta tiempo para compartirlo con todos vosotros. Lo prometo, de mañana no pasa...Gavela ha acertado.

domingo, 17 de abril de 2011

...YA!!!


A poco menos de tres horas para la salida, la suerte está echada. Mientras junto estas letras, tomo el último desayuno antes de la batalla: platano, tazón de cereales y barrita de hidratos. Sólo queda tomar algo más de líquido, rebozarme en vaselina, vestirme, esperar a que llegue Oscar y bajar juntos trotando por la calle Serrano rumbo a Cibeles, para encontrarme allí con algunos amigos. Filípides, vela por nosotros. Amén.

sábado, 16 de abril de 2011

...LISTOS...

No sé si estresa más correr un Maratón o preparar la comida para los 20 comensales entre corredores y acompañantes que mañana vienen a casa tras Mapoma. Afortunadamente, el estrés gastronomico se lo ha llevado Martina, para mí me ha dejado el deportivo. Tras 25 minutos de trote esta mañana y unos progresivos, descanso todo el día, más hidratos e hidratación. Estamos listos, sólo falta que mañana tengamos todos una buena mañana deportiva y por favor, que no tengamos aire. Suerte a todos y nos vemos en meta. Me olvidaba, tranquilo Gonzalo, que no se me ocurre estrenar nada mañana.

viernes, 15 de abril de 2011

PREPARADOS...


¿Estamos preparados?: Lo estamos. Además tenemos zapatillas, dorsal y ganas de correr. Los maratonianos no somos de estrenar el día de la carrera, pero como es Domingo de Ramos y "al que no estrena se le caen las manos", nuestro olímpico y faraónico Alcalde nos hace estrenar a la fuerza: Mapoma 2011 estrena túnel bajo la calle Bailén. Alberto, gracias de corazón. Miles de corredores nos acordaremos de ti este Domingo de Ramos durante unos cientos de metros, agradeciendo tu tan demostrado amor por el deporte popular.

miércoles, 6 de abril de 2011

GAVELA TIENE LA CULPA


El y su maldito test tienen la culpa de que, finalmente, el próximo 17 de Abril me vista de corto para afrontar algo más de 42 kilómetros por las calles de Madrid. Me faltaba un empujón, y entre los ánimos de los amigos que comentáis aquí a diario y la seguridad que me dio ayer realizar el famoso test de Rodrigo Gavela sin molestias, me he lanzado al reto de lo que será correr mi segundo Mapoma, estoy inscrito. Eso sí, encontrarme totalmente recuperado ha sido clave, necesitaba verme bien. ¿El resultado del test? Pues me temo que os vais a quedar con las ganas, mantendré la incógnita hasta el día después de la carrera, veremos si se aproxima el resultado.

Una vez más, gracias a todos por vuestros comentarios , incluidos los de nuestro anónimo comentarista que, aunque no lo parezca, creo que algo de afecto me tiene. Tranquilo, te espero en la meta.


domingo, 3 de abril de 2011

MAS KILOMETROS, ¿GARANTIA DE EXITO?

Empiezo a pensar que, en lugar de un blog, esto empieza a parecerse a un muro de las lamentaciones personal. Tras repasar los entrenamientos de este año y del anterior, veo que entre los meses de enero, febrero y marzo llevo 336 kilómetros menos que la pasada temporada, pérdida de kilómetros motivada por los diferentes "parones sanitarios", como yo les llamo. Casi recuperado de la sobrecarga de aductores que me ha tenido parado esta semana, las dudas me empiezan a asaltar sobre si estaré corto de kilómetros de cara a Mapoma. Veo los entrenos de otros compañeros y la diferencia es notable, pero dudo sobre si será positiva una cosa u otra. Como siempre, espero sugerencias...Ayer volví a la carretera. Rodaje por El Retiro con la idea de probar y si no me encontraba bien, parar. Tras 5 kilómetros de calentamiento, paro a estirar los aductores y retomo la ruta. Como me encuentro cómodo, sigo y completo 1h30' a 5'16" de media. Esta mañana, entreno con el grupo de Mapoma. Series de 400, 10 repeticiones.

El martes, más.