Al llegar esta mañana al Cagigal, algunos de los compañeros de Mapoma comentaban, entre risas, que preferían haberse quedado en la cama a tener que entrenar con el día que se presentaba. Pero sabía que la mañana se presentaba divertida. Sólo la idea de correr sobre el barro y bajo la lluvia hacía el entreno más que apetecible, de todos es sabida mi afición por correr en estas condiciones. Antes de empezar, confirmo allí mi participación en la Media de Coslada.
De entrada los ejercicios de calentamiento los hicimos en una parte cubierta del polideportivo y de allí nos fuimos a la Casa de Campo,a realizar el primer rodaje de 25', a ritmo tranquilo, aprovechando para cambiar impresiones sobre los resultados de la Media de Fuencarral. Y llegamos al Bosque de Garabitas, que todo popular que entrene por la CdC conoce. Hoy tocan series de 1000, y allí Félix nos va indicando los ritmos. Mi grupo ha sido agraciado con 6 miles a 4'50"-4'40". En la primera recta, el terreno está compacto y con algún charco por los laterales, pero una vez que la dejamos, el terreno está más blando y a pesar de que Chema, que una vez más nos marca los ritmos, nos aconseja que vayamos por el lateral, veo que el terreno está muy ondulado, con algunas hondonadas y opto, como otros compañeros, a ir por el camino, con lo que nos metemos en todo el barrizal, y así las 6 veces. Empezamos más lentos y hacemos el último 1000 a 4'27". Estoy sorprendido, porque después de todo el trabajo de la semana, tengo las piernas como si nada. Cada día estoy más convencido de que es gracias al trabajo bien planificado. Y terminamos con otros 20' de rodaje a ritmo tranquilo, para soltar piernas. Las de la foto, son mis Supernova después del entrenamiento. Se intuye la marca en la zapatilla de la derecha.
