A veces la vida te pone pruebas complicadas, más duras si cabe que un maratón ...y esta vez nos ha tocado de pleno. El domingo no estaré corriendo con vosotros los 42 kilómetros de nuestro maratón madrileño. Estas últimas semanas están siendo duras para nosotros y mi cabeza está en otras cosas, intentando entender lo dura que puede volver a ser la vida una vez más.
Suerte a todos amigos, os estaré animando.